A la edad de once años escribí mi primer poema que nunca publiqué, AL VIENTO.
Oh viento que la alegría brindas
y los poetas cantan te con emoción;
los ruiseñores trinan sus lindas canciones
que les brota del corazón;
para henchir de notas el hermoso jardín;
que de mil flores perfumadas
sobresale la blancura del jazmín.
En la secundaria, pertenezco a la Promoción 1960 del Colegio Nacional "San Pedro", me incliné por el fútbol; había heredado ciertas cualidades de mi padre, Don Nolberto Unyén Peláez, considerado como uno de los más grandes deportistas de la década del 30; cuando el famoso "Chino" Manuel Rivera Sánchez, integrante de los Seleccionados Nacionales de fútbol y del Deportivo Municipal de Lima, hoy su nombre lleva el Estadio Centenario de Chimbote; abandonó el fútbol profesional vino a jugar por el Club "Manuel Rivera", dedicándose a buscar nuevos valores, entre ellos llegamos los hermanos Ostolaza, Germán y Tato; yo tenía 16 años y me hizo jugar a su lado; al año siguiente por una disposición de la Federación Peruana de Fútbol se tuvo que cambiar de nombre y se le puso el de la calle en que funcionaba el Club, es decir "José Gálvez, por el que tuve el honor también de jugar, antes de irme a estudiar en la Universidad Nacional de Trujillo, de la que llegué a ser Presidente de la Asociación Universitaria Chimbotana (AUCH), miembro del Consejo Universitario, Federación Universitaria de Trujillo, egresando como Presidente de la Promoción 1966 de la Facultad de Farmacia y Bioquímica, realizando un viaje promocional por los países de México, Miami (EE.UU.) y Panamá.
Ya de retorno en Chimbote, inauguré mi Farmacia "UNYEN", fuí socio fundador y segundo presidente de la Asociación "Wha Yoi" (1971), adquiriendo el terreno y posterior edificación de su local institucional en la sexta cuadra de la Avenida José Pardo; el año 1976 fundamos el Instituto Cultural Chimbote, y ese mismo año me nombraron Concejal de la Municipalidad Provincial del Santa, logrando que se cree el Instituto Nacional de Cultura de Chimbote y su primer director; integrar la Comisión Gestora de la Universidad Nacional del Santa, el reconocimiento de la Huaca Moche del Pueblo Joven San Pedro por el INC; la puesta en funcionamiento de una moderna Biblioteca "Inca Garcilaso de la Vega", en el hoy distrito de Nuevo Chimbote.
Hay una anécdota, cuando se me nombra Inspector de Cultura de la Municipalidad, se levantaron unas voces, las que nunca faltan, ¿por qué se nombraba en la Inspección de Cultura a un Farmacéutico?. Reuní mis trabajos de estudiante,se los entregué a los poetas Drs. Miguel Rodríguez Paz, HUgo Vargas Tello, y prof. Iván Vásquez Salazar, de lo más selecto en ese tiempo, los que fueron benévolos conmigo, y gracias a ellos continué en esta hermosa tarea de promover cultura, en tiempos en los que era muy difícil hacerlo; con ese aval, edité el libro "Evocación Chimbote", el primer poemario publicado en Chimbote, con sus deficiencias, pero eran producto de un joven estudiante de ese Chimbote del ayer que buscaba su camino (1977); el poeta Jaime Guzmá Aranda, lo proyectó a un mayor nivel con la publicación de comentarios en los diarios capitalinos "La Prensa" y "Ultima Hora"; luego vendría mi libro "El Despertar de un Coloso" (1979), que en el mes de diciembre cumplirá sus "Bodas de Plata" al servicio de la educación y la cultura.
Se que mis libros son polémicos, tengo un gran número de detractores, sobre todos de los que se creen doctos, críticos literarios o simplemente "grandes poetas"; que han tratado de ignorarme en las aulas, en los diarios; pero como Dios es grande, mis obras están difundidas en diversas antologías internacionales, tengo un poema traducido al chino, una novela al inglés; mis poemas declamados en Congresos Mundiales, México, Estados Unidos, República China, Argentina, etc.; he participado y organizado Congresos Mundiales de Poetas en Taiwán, México, Argentina, Perú. He sido incluido en la Enciclopedia Ilustrada del Perú, del Dr. Tauro del Pino, distribuida con el Diario "El Fomercio", etc. Además mi labor lo empecé cuando estos jóvenes aún no habían nacido, y con nuestro trabajo les hemos dejado un campo fértil que espero lo sepan aprovechar, con menos soberbia y más humildad. Si eres mas grande se más humilde.
Víctor Unyén Velezmoro
domingo, 28 de junio de 2009
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